Decir que la crisis de España es estructural,es una afirmación que no extraña a nadie. Lo sabe ,a estas alturas ya , todo el mundo.Si cuando el auge del ladrillo ,es decir, de la construcción, que ocupaba a una significativa porción de la población activa española,entre empleos directos y la industria que abastece de materiales,así como todo tipo de negocios que se instalaron a su vera,el paro no bajaba de los dos millones.El paro es estructural y eso quiere decir que hay un porcentaje de población que subsiste sólo a base de subempleo ,de economía sumergida.Ello es muy peligroso pues no pagan impuestos y compiten de forma desleal (sus empleadores) con quienes respetan las normas.Pero también se producen estas malas prácticas en otros países como Italia,y no por ello se ha producido una crisis de alcance y profundidad parecida.La presidencia de José María Aznar y del Partido Popular ,que ahora se reivindica tras el estrepitoso fracaso de PSOE y del Presidente Rodríguez Zapatero,¿Están en la raíz de la situación actual? O por el contrario le debemos dar todo el «mérito» a estos «jóvenes aunque sobradamente preparados»,que decía el anuncio,que todavía tienen el gobierno de España.Es un pregunta de difícil respuesta…Pero voy a intentarlo¿Qué ha fracasado realmente? Como en tantos momentos de la vida lo que ha fracasado es pensar que las cosas podían permanecer igual durante mucho tiempo,o incluso eternamente.Es una muestra de inocencia ,pero también el reflejo de la codicia instalada en el propio sistema económico.Si a ello añadimos las inercias de un sistema estatal muy sobrecargado y mal coordinado .El sistema autonómico tiene muchas virtudes ,pero es un sistema «a la española» o sea chapucero a más no poder.Subsisten estructuras del viejo estado centralista con todas las «novedades» imaginables del nuevo.Eso lo hace caro,redundante, contradictorio y muy inoperante.Fomenta cuando no «ampara» ,en el sentido de que hace más difícil descubrir,la corrupción,o por lo menos retrasa bastante su persecución y castigo.Ello también se deriva de un sistema judicial,a pesar de algunas mejoras, muy obsoleto y bastante ineficaz.El sistema que hemos recibido de la crisis industrial de los 70 y 80,la que heredó el Presidente Suárez y la UCD del franquismo y la que tuvo que dar solución el Presidente Felipe González.Significó la liquidación de gran parte de la industria metalúrgica pesada.Los altos hornos de fundición tanto del País Vasco,como de Valencia,así como ,progresivamente,casi toda la industria textil catalana etc. En estos años de reconversión los gobiernos intentaron por todos los medios:ayudas fiscales,terrenos cedidos a muy bajo precio,infraestructuras, incrementar la presencia de la industria automobilística,química,petroquímica,y la ligada a las nuevas tecnologías,con un resultado irregular …pero positivo.El incremento y mejora de las comunicaciones también ha supuesto un polo de atracción para el otro gran motor económico de estos años: el turismo. El aspecto negativo que ha tenido es que «para hacer una tortilla has de cascar algún huevo» ,y así parece haber sido.No puedes atraer turismo de «calidad» sin construir urbanizaciones de lujo,hoteles y campos de golf…No puedes atraer turismo de ninguna clase sin una oferta hotelera amplia y diversificada…Pero ha llegado un momento que entre las inversiones provenientes de los fondos (de cohesión,regionales etc) de la UE,y las «aportaciones» de inmigrantes europeos que se instalaban en España ,amén de las provenientes
de los propios españoles ,convenientemente pasados por algún paraíso fiscal,para parecer inversión extranjera,la inversión en ladrillo pareció la solución ilimitada.Los precios no paraban de crecer y para ello encontraron a un aliado tan sobrenatural que no parece ser de este mundo: el Sistema Financiero.Los bancos privados y las cajas de ahorro «sociales»,han apoyado como nunca el sobrecalentamiento de un mercado en el que ,al menos incialmente,entraron con cierta timidez.Los bancos «industriales»,los bancos «comerciales» y las cajas «sociales»,fueron descubriendo a final de los ochenta y principios de los noventa que el negocio estaba en las hipotecas,y se fueron centrando cada vez más en él.La captación de pasivo también se traducía en operaciones menores préstamos personales,tarjeta Visa,pagos aplazados etc pero ,progresivamente el papel de la financiación al constructor o a cada comprador fue ganando terreno.El sistema avisó de su volatilidad ( como dicen en la Bolsa) inmediatamente después de Barcelona 92,pues el mercado inmobiliario y con él todo el sistema hizo amago de hundimiento …pero aguantó y se recuperó con mucha vitalidad tras cuatro años de estancamiento y caídas.
De todos es conocido que en los últimos años las llamadas a la cordura, y ha detener la expansión de la «burbuja inmobiliaria»,han sido ridiculizados por la patronal del sector y la propia banca,que veía amenazados sus intereses.Tras el desplome de precios ,la banca es la mayor inmobiliaria del país.Muchas constructora han quebrado. El sistema de mútiples intermediarios inmobiliarios (parecían videoclubs en los 80as) se han reducido a la mínima expresión.Y el número de parados está llegando a máximos históricos.
La responsabilidad del gobierno de Rodriguez Zapatero se ha cifrado en una gran improvisación ,desoyendo las llamadas a la prudencia de su Ministro de Economía Pedro Solbes,se lanzó a una política social-populista muy poco estudiada y peor planificada.El resultado todos lo conocemos
le pilló la gran oleada de crisis mundial con el pie cambiado y en el peor momento.Los fondos de la UE se están cerrando ,en un momento en el que el Estado tiene peor nivel de ingresos y los gastos descontrolados.Hemos pasado por dos años de recesión o de crecimiento casi nulo.Los bandazos en política económica y fiscal son poco efectivos y la política social (a pesar de algún éxito) ha resultado insuficiente.